Hoy hace
exactamente un mes que pise tierra firme, que aterricé de mi sueño americano. La
vuelta a la vida real ha sido dura. Pasas de estar caminando por Times Square
en Nueva York a verte de paseo por la Avenida del Mar del Grau de Castelló. Ambos
caminos con encanto, por supuesto, pero muy diferentes, igual que mi vida. Cuesta
bastante asimilar que todo ha terminado.
Cuesta asimilar que ya no
dormirás en esa litera de la que un día te caíste, que ya no tendrás
conversaciones absurdas sobre extraterrestres con tu amiga española o que ya no
podrás vivir la primera historia de amor de tu roommate de tan solo 18 años.
Hace un
mes dejé Coe College y allí dije adiós a mi nueva familia. Lo que más duele es
pararte a pensar cuándo volverás a verles y esa sensación es mucho más agria
cuando por tu cabeza pasa el típico…¿Y si no nos volvemos a ver en la vida? Se
que eso no va a pasar. Por lo menos eso es lo que deseo con todas mis fuerzas.
En
Estados Unidos he conocido a personas maravillosas con las que he compartido
cuatro meses impresionantes. También me queda la espinita de no haber
compartido más tiempo con personas con las que empecé a tener contacto el último
mes. Lo más importante es que han formado parte de mí, de la experiencia de mi
vida y que gracias a ellos soy lo que soy ahora mismo.
Sigo
siendo la misma persona, y todos mis amigos que han estado durante este mes
ayudándome a aterrizar en la realidad se habrán dado cuenta. Lo único es que aún
tengo más ansia por comerme el mundo. Vaya paradoja, justo ahora que me he
puesto a dieta… :P
Este
mes ha sido especial. Reencuentros. Familia. Amigos. Regalos. Turrones. Fiesta.
Libros. Amor. Año nuevo. Barcelona. Recuerdos. Aburrimiento. Tristeza. Pero ante todo Felicidad por lo vivido y por lo que queda por vivir.
El
lunes que viene dará inicio el último semestre en mi Grado en Periodismo. Tras
esto, podré llenarme la boca al decir que ya soy una periodista. Mi sueño desde
que era una niña. El problema es que solo será un título que quedará
arrinconado en un cajón. Solo serán dos palabras que podré pronunciar con
orgullo. No pretendo ser pesimista, simplemente realista. Tras analizar el
estado actual del periodismo estoy segura que el próximo Junio por mi cabeza
rondará el…
Y ahora…¿qué?
Elena Trujillo
Elena Trujillo